Proyecto de interioridad
¿Qué buscamos?
Vivimos en un mundo lleno de ruido donde se nos pone al alcance todo tipo de experiencias, conocimientos u objetos que queremos muy rápidamente y sin apenas espera.
A menudo sufrimos el riesgo de vivir con un ritmo frenético que no nos deja disfrutar de lo que conseguimos y todo lo observamos de forma muy superficial. Ante todo esto, en nuestra escuela encontramos la necesidad de educar la interioridad de los niños y jóvenes.
Se trata de educar a nuestros alumnos para que den lo mejor de sí mismos y que, haciéndolo, puedan sentirse satisfechos y felices por colaborar en la construcción de un mundo mejor.
El trabajo de la interioridad en nuestra escuela no se opone a la exterioridad, sino a superficialidad y dispersión. La interioridad no puede llevar al alumno al individualismo y al alejamiento de las problemáticas que se puede encontrar a su alrededor. Hablamos de interioridad como contrapunto a un estilo de vida demasiado consumista y superficial.
A través del trabajo de la interioridad, ayudamos a nuestros alumnos a conocer, entender y aceptar el sentido de sus vidas incorporando la presencia de Dios, los valores cristianos y los modelos de Jesús y María.
Se trata de trabajar la religiosidad para garantizar un pleno desarrollo de las tres dimensiones fundamentales de la persona cristiana: el yo, el yo con los demás y el yo con Dios.
Fundamentos
El proyecto de interioridad de nuestro centro nace de un trabajo de reflexión previo realizado por nuestro Equipo de Pastoral con el filósofo y teólogo Francesc Torralba.
Francesc Torralba habla de una inteligencia espiritual, una inteligencia entendida como capacidad que tiene la persona de ser consciente de lo que siente, de lo que le ocurre, de conocerse a sí misma, de determinar qué hace con la su vida, de decidir y darse a los demás.
Esta inteligencia espiritual, también llamada interioridad, es la que se encuentra recogida en nuestro perfil del alumno SSCC como dimensión espiritual y está alineada con el carisma de nuestra Congregación: contemplar, vivir y anunciar en el mundo el amor de Dios.
¿A quién se dirige?
El proyecto de Interioridad incluye a toda la comunidad educativa y, por tanto, va dirigido a la Entidad Titular, alumnos, familias, profesores, PAS, monitores y educadores de extraescolares. En el caso de los alumnos, nuestro Proyecto de Interioridad se incluye dentro del Perfil del alumno que busca, en última instancia, alcanzar a alumnos competentes desde una perspectiva integral que abarque la misión, visión y valores de nuestra congregación, especialmente los que hacen referencia a la vida espiritual.
¿Cómo se trabaja en el día a día?
Educar la interioridad debe ser una forma de ayudar a los niños y jóvenes a buscar el sentido de su vida. El alumno debe conseguir adentrarse y descubrir su mundo interior y acabar planteándose las preguntas sobre el significado y sentido de la vida. El alumno debe percibirse como centro de su educación e investigación de su yo más auténtico.
Teniendo en cuenta las necesidades observadas, es necesario sistematizar el trabajo de la interioridad en la escuela dando espacios y tiempos que posibiliten que los alumnos se encuentren consigo mismos y descubran que la experiencia interior nos conecta no sólo con nosotros, sino también con los otros y con Dios. Para nosotros es importante que el alumno llegue a Dios a partir del trabajo del silencio, la reflexión, la concentración, interrelacionándolo con los contenidos de las distintas materias, especialmente la religión.
A continuación, puede ver algunas de las actividades más significativas que se realizan en la escuela que fomentan el trabajo de la interioridad.